Formación:
Licenciatura con honores en Matemáticas por la Universidad de San Luis; maestría en Economía Política Internacional y Desarrollo (IPED) por la Universidad de Fordham; maestría en Divinidad por la Escuela de Teología y Ministerio del Boston College; maestría en Teología por la Escuela de Teología y Ministerio del Boston College
¿Quién es su santo favorito y por qué?
Uno de mis santos favoritos es San Óscar Romero de El Salvador. Experimentó una profunda conversión cuando ya era obispo, la cual lo inspiró a hablar contra la pobreza y la injusticia en medio de la guerra civil de El Salvador. Sus condenas al gobierno que asesinaba y torturaba a los ciudadanos lo llevaron a su propio martirio. Monseñor Romero fue asesinado a tiros mientras estaba en el altar celebrando la misa. Me inspira su apertura a la conversión más tarde en su vida adulta y su implacable convicción de hablar en nombre de los pobres. Cometió el último acto de sacrificio por amor al pueblo de El Salvador, dando su propia vida. En el verano del 2011 visité la capilla donde fue martirizado, justo un mes antes de entrar en el noviciado. Monseñor Romero dijo: «No creo en la muerte sin resurrección. Si me matan, resucitaré en el pueblo de El Salvador». En mis experiencias en Centroamérica, su espíritu está vivo y sigue inspirando y animando a la gente.
¿Qué le gusta de la Compañía de Jesús?
Me gustan muchas cosas de la Compañía de Jesús. Me encanta que nuestra espiritualidad esté enraizada en los Ejercicios Espirituales de San Ignacio y en nuestra relación personal con Jesús. Me encantó la oportunidad de hacer el retiro de 30 días como novicio, que fue la experiencia espiritual más profunda y fundacional de mi vida. Me encanta el Examen como práctica regular para identificar la gracia de Dios en mi vida y mi propia respuesta a esta. Me encanta nuestra comunidad como misión y cómo nos apoyamos unos a otros en nuestras vidas y vocaciones. Me encanta nuestro ministerio apostólico: en la educación y en el ministerio social y pastoral. Me encanta encontrarme con jesuitas mayores, preguntarles dónde han vivido y trabajado y escuchar las diversas experiencias de sus vidas y la sabiduría que han adquirido. Me encanta el compromiso de la Compañía de Jesús de ir hacia los marginados y proclamar el Evangelio. Me encanta… ¡Jesús! (¡De quien la Compañía toma su nombre!)
