Posordenación:
Servirá en la Parroquia Católica de San Rafael Arcángel en Raleigh, Carolina del Norte.
Licenciado en Contabilidad por la Universidad Saint Joseph; máster en Recursos Filosóficos por la Universidad de Fordham; máster en Divinidad y licenciado en Sagrada Teología por la Escuela de Teología y Ministerio del Boston College Clough.
Mi santa favorita es Santa Faustina Kowalska, monja y mística polaca del siglo XX. Conocí los escritos de Santa Faustina cuando tenía 18 años, y su mensaje de la Divina Misericordia me llegó profundamente.
A lo largo de mis años como jesuita, he releído su diario varias veces y he leído regularmente extractos de sus escritos. Encuentro que algunas de las alegrías y luchas que ella tuvo como religiosa son las mismas que las mías. Sus ideas sobre la oración y su relación con Jesús me han ayudado a crecer en mi propia espiritualidad. Por eso, siento una verdadera comunión con Santa Faustina y rezo a menudo pidiendo su intercesión y guía.
Un encuentro profundo con la Divina Misericordia.
Llegué a la Compañía con una formación en temas empresariales y un conocimiento muy básico de la filosofía. Sinceramente, no tenía ni idea de lo que me esperaba cuando empecé mis estudios de filosofía e incluso estaba un poco inseguro del valor de la filosofía.
Sin embargo, durante mis estudios en Fordham, para mi sorpresa, descubrí que me gustaba mucho la filosofía. En concreto, me resultaba intelectualmente estimulante hablar de Dios en un entorno filosófico. Por eso, la filosofía ha formado parte de mi formación como jesuita. Además de los estudios, me he encontrado asistiendo a conferencias, charlas y escuchando charlas sobre filosofía. Nunca en mi vida había previsto que este campo sería una parte tan importante de mi formación jesuita. Espero seguir cultivando mi interés por la filosofía y ponerlo al servicio de la Iglesia.
